EL MALESTAR DE LA CULTURA FREUD, SOBRE LAS RESTRICCIONES AL INDIVIDUO POR LA CULTURA

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“La satisfacción de los instintos, precisamente porque implica tal felicidad, se convierte en causa de intenso sufrimiento cuando el mundo exterior nos priva de ella, negándonos la satisfacción de nuestras necesidades”[2] La felicidad es un propósito o una aspiración que tienen los humanos en sus vidas que se puede ver de dos formas, en un sentido positivo, el evitar dolor y displacer, en sentido negativo, experimentar intensas sensaciones placenteras. El autor se refiere que en sentido estricto se alude al sentido negativo y que el principio que rige es el del placer, lo que conlleva que se relacione con el super-yo, por lo tanto, si el mundo exterior es la cultura imperante donde residen los individuos, es esta misma la que restringe a través de preceptos morales y de hecho, relacionado con el sentimiento de culpabilidad que se habló anteriormente, ya que la cultura tiene por objetivo proteger al humano de la Naturaleza y de regular las relaciones de los hombres entre sí. Las exigencias de la cultura son la belleza, orden y limpieza. Pero lo que más incumbe en relación a la felicidad con la cultura es la sublimación de los instintos como elemento cultural sobresaliente, ya que significa una mayor utilidad para la cultura en lo que concierne al progreso, por lo tanto, la felicidad se verá distanciada, pero habrá una mayor seguridad entre los individuos. Entonces el hombre tendrá que emplear la mayoría del tiempo en el trabajo en desmedro de satisfacer sus necesidades instintivas, todo esto impuesto por la cultura a partir de los preceptos morales, que en definitiva, actúa el super-yo.

En conclusión, un libro muy interesante de leer por sus argumentos presentados, aunque siento que introduce siempre el aspecto sexual en cada uno de los temas que se presentan en el texto, son fundamentos creíbles, ya que me hace reflexionar en la actualidad por la cual estamos viviendo donde definitivamente puede presentarse la posibilidad de que en realidad esté pasando. Según el autor, la cultura ha sido un factor importante en lo que respecta a la relación de los individuos y sus necesidades instintivas, desarrollando distintos mecanismos para acentuar la unión entre los hombres, ya que estos por naturaleza son hostiles entre sí, así, restringiendo las necesidades instintivas ligadas al super-yo y por lo tanto, distancia la felicidad del hombre.

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