La discriminación presente en la formación de relaciones interpersonales, en base a la importancia que se le otorga a la percepción de la belleza exterior, según la mercadotecnia.

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En cambio para Aristóteles marca la belleza como la esencia de todas las cosas, aquello que nos agrada que nos haga sentir bien, en cuanto a nuestra inteligencia y como lo percibimos desde nuestro interior, así como todo aquello que consideremos hermoso, será lo que más nos gusta.

Al contrario de estos dos autores ya mencionados, se encuentra Descartes, él hace mención que la belleza se califica como un orden de la razón, es decir, aquí la belleza no es lo interior si no la inteligencia que posee la persona de una manera subjetiva, como lo ven. Así también Kant nos habla de una belleza racional, donde tiene que ser aceptados por los sentidos de la persona, ya que cada persona lo aceptara, en cuanto sensaciones le provoquen y no por lo que vean.

Cada autor nos aporta diferentes formas de pensar, ahora nos encontramos con Hegel que nos habla de una belleza, desde un pensamiento lógico pero al mismo desde el espíritu, donde la persona impone su propia realidad de lo que ve o lo que quiere demostrar con ella.

Pero para Nietzsche, ve la belleza como un elemento esencial en la vida, puesto sin ella, no podríamos concretar nuestro pensamiento, ya que la belleza no impone sus reglas, y deja ser libre a la realidad.

Estudios antropológicos sobre el cuerpo han provisto una perspectiva cultural comparativa que toma en cuenta los valores y creencias de individuos de sociedades y culturas distintas (Mead, 1975; Pesenti, 1984; Sault, 1994). El interés por estudiar la construcción social del cuerpo y de la feminidad desde la antropología radica en el hecho de hacer evidente el carácter histórico y cultural de tales construcciones, analizando no sólo el contexto, sino también la manera en que cada mujer resignifica ese contexto. Es importante mencionar, dentro de este campo, a Le Breton (1995) y su obra Antropología del cuerpo y modernidad, en la cual se realiza un estudio del mundo moderno desde una perspectiva antropológica y sociológica cuyo hilo conductor es el cuerpo. (Marinho, M.)

De aquí podemos rescatar algunas características más significativas que permiten definir la belleza, las cuales son:

1.- la belleza como trascendental del ser. Toda realidad es buena, verdadera y bella. En la producción y contemplación de la belleza avanzamos un paso más en la búsqueda y donación de sentido que debe guiar nuestra existencia en el mundo.

2.-la belleza como forma. El ámbito de la belleza no es el ámbito de las verdades declarativas, ni algo que podamos expresar. En cualquier producción humana, la belleza tiene que ver con unas determinadas características que afectan a la forma en que esa producción se presenta. La disposición de los objetos, las relaciones que se establecen entre las partes y el todo, el equilibrio armónico entre los diferentes elementos, estas y otras características son las que define la belleza de un objeto.

3.- la belleza más allá de lo útil. El ámbito de la belleza está abierto a un libre juego de la creatividad humana. También es cierto que nada añade a la utilidad inmediata de un objeto el hecho de que, además, sea bello. Sin embargo, los seres humanaos se han esforzado por dotar a todas sus producciones, incluidas las más simples y cotidianas, desde ese plus de belleza conscientes de que, desprovistos de belleza, los objetos terminan perdiendo su utilidad en un proyecto global de vida dotada de sentido.

4.-carácter simbólico de la belleza. Siendo siempre algo particular y concreto, remite a una totalidad, a una plenitud de sentido. Ante la presencia de algo bello, nos vemos embarcados en una actividad constante de comprensión en la medida en que siempre hay en ese objeto algo que se nos manifiesta, pero también algo que permanece oculto, lo que hace posible que podamos contemplarlo una y otra vez sin agotar sus posibilidades expresivas.

5.- la belleza más allá de la temporalidad y la fugacidad. La percepción de la belleza supone una ruptura en la percepción de la temporalidad y la fugacidad. Es decir, al contemplar un objeto bello, parece como si la temporalidad se suspendiera, como si dejaran de pasar los momentos e interrumpiera en nuestra vida un fragmento de la eternidad. Es por eso que la belleza puede ser considerada como la coronación de los esfuerzos del ser humano por alcanzar una vida dotada de sentido.

(santiago, 2013)

Así como los autores nos marcan desde lo espiritual, así como la esencia, nos podemos encontrar con estudios donde, la cultura y todo lo social que nos rodea, influirá mucho en nuestros interés de como veremos la belleza y de donde la estaremos observa, para formar nuestro propio concepto de belleza, en base a lo que estaremos viendo.

PERCEPCIÓN INTERPERSONAL

Las relaciones interpersonales comienzan con la percepción de la otra persona, con un conocimiento y una evaluación de sus atributos, de sus intenciones y de sus probables reacciones a nuestras acciones. La percepción interpersonal está influenciada por procesos subjetivos: actitudes, emociones, deseos, intenciones y sentimientos.

La expresión de un estereotipo negativo a menudo está asociada con actitudes de prejuicio, la tendencia a usar estereotipos al juzgar a la gente es general y muy común y en ocasiones es un signo de actitudes prejuiciadas.

Los estereotipos sobre grupos le permiten al individuo encajar un gran número de personas en categorías simples.

En la formación de una impresión respecto a una persona, si la persona que percibe, capta en el otro algo favorable, favorece una impresión general de la persona percibida favorable. Por el contrario, si la persona que percibe, le nota un rasgo desfavorable a la otra persona, disminuye una impresión general favorable.

MANIPULACIÓN DE LA IMPRESIÓN

La gente trata de causar buena impresión mostrando sus cualidades positivas y escondiendo sus defectos en presencia de aquellos individuos cuya opinión se considera de valor.

La persona objeto de percepción, manipula deliberadamente su imagen con el fin de aumentar su atractivo ante la persona que juzga.

PREJUICIO Y DISCRIMINACIÓN

El prejuicio es una actitud negativa hacia miembros de un grupo específico, puede representarse como un continuo simple de una emoción que varía en intensidad de un desagrado leve a un odio abrasador. Como también hay prejuicios que implican actitudes positivas, representadas por agrado hacia un grupo específico.