Definición del Problema y Antecedentes Diagnósticos

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hacia estas personas en el contexto de los tratados internacionales que plantean que debe considerarse al recluso "como un sujeto de derecho, que no se encuentre excluido de la sociedad, sino que continúa formando parte de la misma"(1), esto debe ser el principio inspirador del cumplimiento de las penas y medidas de seguridad privativas de libertad. Por tanto, la "vida en prisión debe tomar como referencia la vida en libertad reduciendo al máximo los efectos nocivos del internamiento, favoreciendo los vínculos sociales, la colaboración y participación de las entidades públicas y privadas y el acceso a las prestaciones públicas" (1)Reglas 57 y 60 de las Reglas Penitenciarias para el Tratamiento de Reclusos de las Naciones Unidas.

Las tasas de encarcelamiento han ido aumentando al mismo tiempo que el número de niños que viven en hogares sin sus padres. Esto conduciría a pensar que los cambios de política en materia penitenciaria, destinados a disminuir los índices de delincuencia, pueden traducirse en un aumento de las tasas de delincuencia a largo plazo, debido al aumento de factores sociales que contribuyen al delito, tales como familias desintegradas que necesitan obtener recursos o la sustitución, en el tráfico de drogas, de los jóvenes delincuentes encarcelados. (NCOFF, 2000). Por otra parte, hay que tener presente que el efecto producido por el encarcelamiento de un progenitor raramente es elaborado desde un punto de vista psicológico. Generalmente, la familia no les explica lo que ha sucedido, a menudo se les engaña sobre donde está el padre o la madre, y no se les dice la verdad respecto al tiempo que no estará. Todo esto crea angustia en los niños/as, que no entienden la ausencia. La separación causada por encarcelamiento de los padres también está fuertemente asociada con muchas otras causas de riesgo en la infancia. Pero incluso después de controlar estos otros elementos los niños y jóvenes en situaciones antes descritas son altamente vulnerable, con múltiples factores de riesgo que dan muchas veces resultados adversos, ya sea porque el encarcelamiento de los padres parece afectar a los niños por encima de experiencias de separación y riesgos asociados, permitiendo prever de comportamientos antisociales a estos, es decir posibilitaría la creación de conductas delictivas en un futuro próximo y, por ende, contribuir a la transmisión intergeneracional de la delincuencia, Cabe señalar que la experiencia ha demostrado que la privación de libertad transforma las relaciones a todo nivel, en particular la paterno/filial. Estos cambios afectan la vida de niños/as -víctimas secundarias, privándolos de la cotidiana presencia del padre; madre y en algunos casos de ambos, por ello es necesario abordar esta problemática desarrollando un programa destinado a la prevención de conductas antisociales de los niño y adolescentes, aumentando la resiliencia, su incorporación a la comunidad, aumento de su autoestima, con ello disminuir la estigmatización. La delincuencia es un problema complejo y multifactorial que puede ser abordado de múltiples formas, por ello es urgente desarrollar estrategias y herramientas de prevención, especialmente hacia el grupo etario de niños, niñas y adolescentes que cometen infracciones de ley. En conclusión, se reconocen factores importantes de carácter tras-generacional, en la iniciación de la criminalidad. Estos son de variada naturaleza:: sociales, psicológicos y biológicos. El reconocimiento de la importancia de estos factores en la predicción y la intervención temprana ha sido tomado en cuenta, tanto en Chile como en otros países, lo que ha dado origen a programas de trabajo como el antes señalado, los que han tenido cierto éxito, aunque aún queda mucho por hacer, es por ello que creemos que nuestro país necesita políticas efectivas que vayan en dirección a la disminución de la delincuencia, y para ello es necesaria la intervención desde todos los flancos, además de incluir la prevención en conductas futuras delictivas

En nuestro país los programas de prevención temprana son en general muy poco intensivos, siendo su efectividad al menos dudosa (ver Allende y Valenzuela (2008) “Programa 24 Horas: evaluación de una estrategia de seguridad pública”). Muchas veces se conceptualiza como prevención las labores de rehabilitación (o habilitación) social de menores que ya han cometido delitos, cuando la prevención se orienta más bien a la inhibición de dicha comisión de delitos (en contraste a la rehabilitación).

El Programa 24 Horas necesariamente debe estar inserto en el marco antes mencionado, y debiese actuar en forma coordinada con los distintos programas de la red de tal forma poder lograr efectivamente prevenir el delito en menores de alto riesgo delictual en el momento oportuno.

Las intervenciones del Programa 24 Horas, debieran ser inmediatas, especializadas, integrales, intensivas y sistemáticas. Esta constituye la intervención inicial del programa lo que creemos necesario implementarla, la cual debiese ser entregada directamente por el equipo municipal a cargo del Programa 24 Horas, como de hecho ocurre en una parte importante de los casos estudiados. De esta forma es más probable, a nuestro parecer, otorgar una intervención con las características señaladas siempre y cuando estos equipos cuenten con el apoyo necesario, tanto humano como financiero.

Los equipos municipales que son los encargados de ubicar y diagnosticar a algunos o todos los casos que registran las listas enviadas por Carabineros, el equipo gestor debe entre otras tareas, selección de los niños, niñas o adolescentes con que se va a trabajar finalmente, ubicación y diagnóstico de ellos, derivación de cada caso, y seguimiento y evaluación de todos los casos tratados y entregar a Carabineros toda la información de las acciones realizadas.

Las intervenciones encaminadas a fortalecer las conductas sanas dentro del entorno familiar que apoyan emocionalmente al niño o adolescente, pero que además sirve de modelos de Conductas sociales proactivas, se logran desarrollar en intervenciones familiares y sociales terapéuticas. La psicoterapia tiene el carácter de apoyar y modificar las conductas al interior de la familia.

Las acciones antes señalada, han tenido cierto éxito, aunque aún queda mucho por hacer, es por ello que creemos que nuestro país necesita políticas efectivas que vayan en dirección a la disminución de la delincuencia, y para ello es necesaria la intervención desde todos los flancos, además de incluir la prevención en conductas futuras delictivas.