La secretaria de Villarrobos “Un cuento para contar”

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Estos cuadernos que en total eran cuatro lograron salvarse de la conflagración que acabo con el archivo de cuentas de la administración municipal ya que el carácter informal de estos los excluía de ser documentos valederos para la contabilidad de la administración pública, y por tal motivo Sofía siembre los guardó en su casa. No fue hasta después de que el alcalde fuera secuestrado por parte de las Marc cuando Sofía desde su sitio de reclusión logro hacerlos llegar hasta la manos del mismísimo comandante guerrillero quien los tuvo en cuenta como elemento probatorio en un consejo de guerra inusual ,donde tuvo más peso lo escrito en aquellos cuadernos que las suplicas y peticiones del acusado. Fue así como luego de toda una tarde de deliberaciones de los jefes insurrectos, se le dio a saber a Roque Peñalisa que tenía un último chance, el cual sería favorable a él, de concordar lo registrado en los libros, con el vivo testimonio los supuestos beneficiados del erario municipal.

El resto de la historia es ya sabida por todos, mas solo cabe preguntarse porque el destino juega con la vida de una población entera, porqué alguien como Sofía pudo haberse visto envuelta en aquella odisea para terminar con su reputación por el suelo y privada de su libertad, porque alguien como Roque Peñalisa un hombre excepcional, dotado del don de gentes al servicio del prójimo y en esencia un buen hombre corrió con igual suerte, o porque pueden prevalecer en la sociedad la nefasta voluntad de poderes colectivos o individuales llámense de derecha o izquierda, cuyo egoístas propósitos terminan por degradar hasta límites inadmisibles la dignidad humana.

Y quizá sea necesario remitirnos a los mencionados cuadernos donde más que otra cosa se da cuenta de la naturaleza caótica del espécimen humano y de la necesidad de este, de valerse de herramientas como la contabilidad para regular sus acciones.