Relaciones Laborales y Recursos Humanos, 1º curso.

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De este modo se empezó a cambiar la estimación del trabajo como fuente positiva y legítima de riqueza. 3.- Trabajo y empleo ¿son términos sinónimos? ¿En qué se distinguen?

El término trabajo surgió con la Revolución Industrial, que fue quien estableció la diferencia entre empleo y trabajo. El empleo se define como una modalidad de trabajo desarrollado en el marco de una relación contractual de intercambio mercantil, de naturaleza jurídica, pública y voluntaria entre la persona contratada y la persona contratante; mientras que el trabajo es la medida o representación del esfuerzo físico o mental que el hombre realiza sobre les medios de producción para generar riquezas, para producir bienes y prestar servicios.

La diferencia, básicamente, consiste en que el trabajo es la actividad económica que una persona realiza, y el empleo, es esa misma actividad pero remunerada.

Así, no se puede considerar empleo cuando una persona hace una labor en su propia casa, por ejemplo. Aunque en este caso se está desarrollando una actividad física, es decir, está trabajando, esta no es remunerada, por tanto no se puede considerar empleo.

4.- ¿Cuando surgió dicha distinción?

Con la Revolución Industrial.

5.- La llamada Sociedad del trabajo se formó a lo largo del siglo…. en torno a la idea del trabajo asalariado como medio de ganarse la vida. ¿Cuáles fueron los acontecimientos o dinámicas sociales que tuvieron importancia decisiva en la aparición de esta sociedad?

Las dinámicas que fueron decisivas en este proceso fueron tres:

La primera dice que el capitalismo, a partir de finales del siglo XVIII, sustituyo el orden feudal corporativo por la economía del mercado, convirtiendo la fuerza de trabajo en mercancía, libre para su comercialización en el mercado.

La segunda establece que a mediados del siglo XIX, la industrialización y la urbanización producen una concentración del trabajo en las fábricas separando claramente lo doméstico y lo laboral. La familia perdió sus funciones públicas (económicas y sociales) para convertirse en una entidad puramente privada mientras el trabajo se convirtió en empleo perdiendo sus facetas privadas. El trabajo pasaba a ser un sistema social particular lo que implicaba una reestructuración de las relaciones de clase, de género y una redefinición del ciclo vital como relación entre infancia, juventud, mayoría de edad y vejez.

Por último, a partir de finales del siglo XIX, el Estado de Bienestar codificó el trabajo como relación entre empleo y desempleo, lo estableció como norma oficial y lo sometió a un amplio reglamento de normas y leyes.