ETAPAS DE LOS PRINCIPALES JUICIOS MERCANTILES

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En mi opinión el juicio que establece mayores beneficios para los acreedores es el juicio ejecutivo.

Porque admite el embargo de bienes, lo que posibilitará en caso de haberlos, que el acreedor en su debido momento logre cobrar lo que le corresponde a través de un remate si fuera necesario.

Es el juicio mediante el cual se puede lograr la finalidad práctica deseada por el acreedor. Mientras la demanda se funde en un documento que traiga aparejada ejecución, como son luna sentencia ejecutada o pasada en autoridad de cosa juzgada y la arbitral que sea inapelable; los instrumentos públicos; la confesión judicial del deudor, las letras de cambio; libranzas, vales, pagares y demás efectos de comercio, cuentas corrientes y cualesquiera otros contratos de comercio firmados y reconocidos judicialmente por el deudor; no se necesita presentar ninguna prueba más. Con esto bastará para que el juez estando todo en orden y a derecho, cumpliendo con todos los requisitos que la ley ordena, falle favorablemente.

El juicio ejecutivo mercantil es un proceso sumario, ya que el objeto del mismo se reduce a examinar la ejecutividad del título base, hay limitación en cuanto a las excepciones que se pueden oponer y, finalmente, se puede promover un juicio plenario posterior para volver a tratar el mismo asunto.

El procedimiento es bastante simple por así decirlo; se presenta la demanda acompañada del título ejecutivo, el juez hace un examen in limine superficial de la demanda y el título, admite la demanda (la puede desechar o pedir una aclaración), expide auto de ejecución y ordena la ulterior notificación; el ejecutor pasa al domicilio del demandado y requiere de pago a este, si se demuestra que el pago ya ha sido efectuado o se efectúa en ese momento, se suspende la diligencia, de lo contrario se procede al embargo y después se notifica al demandado personalmente o por cédula. El demandado tiene un plazo para pagar u oponerse a la ejecución, si no lo hace se acusa la rebeldía y se cita para oír sentencia; si paga, se termina el juicio, pero si opone alguna excepción se abre el negocio a prueba y se continúa el procedimiento hasta la sentencia.

O sea que a través de dicho juicio, se ``presiona’’ de buena manera y dentro de la ley al deudor para que pague, que en definitiva es lo que el deudor quiere y necesita obtener.

Conclusión:

Pude observar que si bien obviamente la finalidad de los tres juicios estudiados es lograr conseguir justicia para el acreedor, el juicio ejecutivo es desde mi punto de vista el más valioso para tal fin.

Referencias:

Código de Comercio, en su apartado “Libro Quinto”,

- “Título Segundo. De los Juicios Ordinarios.” Artículos 1377 al 1390

- “Título Especial. Del Juicio Oral Mercantil.” Artículos 1390bis al 1390bis 50

- “Título Tercero. De los Juicios Ejecutivos.” Artículos 1391 al 1414

Consultado el 19 de abril 2017, disponible en: http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/3_250117.pdf