El desarrollo de Competencias TIC para docentes y la educación virtual

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Ilustración 3 Pentágono de Competencias TIC para Docentes

Aunque las competencias formuladas por el Ministerio de Educación Nacional hacen referencia a todas las actividades de formación educativa en el país, no hay una división clara en las implicaciones de estas competencias para la formación a distancia o virtual. Sin embargo, se puede ver en algunos lineamientos, particularmente en las competencias tecnológica, pedagógica y comunicativa que se orientan al uso de los ambientes virtuales de aprendizaje y los ubica dentro de un alto nivel de complejidad, lo que requiere a los docentes incluir procesos de integración e innovación; además de un amplio conocimiento de los recursos y de las prácticas pedagógicas apropiadas que estimulen el aprendizaje autónomo y la auto-regulación.

En el contexto de la educación virtual en Colombia, en los últimos años se ha buscado mejorar la calidad de la docencia virtual con propuestas y cursos ofrecidos por entidades como el SENA (Servicio Nacional de Aprendizaje) gracias a su amplia experiencia ofrecen cursos para formar docentes para la virtualidad. También se puede encontrar en el mercado educativo algunas instituciones como la UNAD (Universidad Nacional Abierta y a Distancia) y otras instituciones privadas que ofrecen cursos o especializaciones que le permiten a los docentes migrar a una enseñanza en línea con fundamentos pedagógicos y estrategias claras. En otros casos, se encuentran cursos diseñados por y para instituciones educativas que ofrecen formación a distancia o virtual –quienes han identificado las particularidades de su contexto- y los ofrecen a sus docentes como una introducción a la formación virtual; principalmente por la apropiación en el manejo de las herramientas propias del ambiente virtual como las plataformas de aprendizaje (LMS).

A pesar de existir una oferta relativamente amplia para los docentes que buscan mejorar sus competencias docentes en educación virtual, ninguno de estos cursos se orienta a lograr que estos nuevos formadores virtuales obtengan una ubicación clara dentro de los estándares nacionales de competencias TIC, reconociendo sus fortalezas y debilidades; así mismo su desempeño actual y el esperado. Esto deja un vacío en la identificación de la calidad de los docentes virtuales tal como lo hace la formación presencial, lo que sugiere un desconocimiento del estado actual de los docentes virtuales en relación a su formación profesional en competencias TIC. Competencias particularmente relevantes para los docentes-tutores virtuales, ya que la tecnología y la pedagogía de educación virtual son los fundamentos de su quehacer docente en el contexto a distancia o virtual.

En cuanto a las demás competencias como de gestión e investigativa, los formadores virtuales al igual que las instituciones deben establecer mecanismos para lograr el máximo potencial del uso de la tecnología y documentar apropiadamente la información generada en la formación virtual tomando ventaja de las bondades y herramientas tecnológicas que tienen a su favor.

En realidad, los docentes-tutores virtuales desarrollan estas competencias de una forma autónoma; por ejemplo al realizar un ejercicio investigativo más activo, ya que los docentes virtuales deben ser competentes desde la búsqueda y filtrado de información presente en internet; para que por medio de diferentes fuentes, sea compartida con sus estudiantes, asegurándose de utilizar dicha información con una actitud crítica y reflexiva permita la construcción colectiva de conocimiento. Por otra parte, los tutores hacen uso regular de una variedad recursos digitales como elementos híper-textuales, imágenes y videos para presentar los contenidos de aprendizaje.

Estas actividades son habituales en un contexto virtual, pero al contrastarlas con la formación presencial se ubican en un momento de innovación. Por tanto, se puede percibir que los tutores virtuales enfrentan mayores exigencias en términos de desarrollo de competencias TIC, por lo que se hace necesario contar con una apropiada formación docente inicial para la virtualidad.

Innovación Educativa con TIC en la virtualidad

Como se menciona anteriormente, el momento de mayor complejidad y desarrollo es la innovación educativa en cada una de las competencias establecidas en el pentágono. El punto al que todo docente debe llegar, independiente de la modalidad de formación en la que esté inmerso. Por lo cual, todos los agentes y roles educativos deben estar alineados para lograr este propósito.

Recientemente se ha comprendido que las TIC son herramientas de gestión del conocimiento y pueden dar paso o transmitir saberes indispensables para la educación del futuro, como lo indica Morin (1999) ya que promueven nuevas formas de aprender en un mundo complejo, ayudan a comprender las relaciones entre las partes y el todo; asimismo incrementan las oportunidades de aprendizaje, facilitando el intercambio de información (UNESCO, 2010). También ofrecen ambientes de aprendizaje ricos en experiencias que estimulan la creatividad y el sentido crítico de los estudiantes.

Todas estas características hacen parte de las demandas para la innovación educativa con TIC, teniendo en cuenta que en MEN (2013) la define como una práctica educativa mediada por tecnología que se reconfigura pertinentemente en función del contexto para mejorar las condiciones de los actores educativos; además esta debe apropiarse y difundirse por la comunidad educativa para tomar relevancia y garantizar un impacto positivo.

Estas características están presentes en la planeación e implementación de programas virtuales y a distancia. No obstante, el uso e integración de tecnología en el proceso educativo no implica de por sí una innovación, pues no es la tecnología la que determina el factor de innovación sino la forma en que se utiliza para la construcción de estrategias que permitan pensar el proceso educativo como un proceso de desarrollo potencial donde cada estudiante sea un sujeto de aprendizaje -no de enseñanza- capaz de transformar su realidad encontrando soluciones para sí mismo y su comunidad.

En conclusión, se podría pensar que los docentes-tutores virtuales están un paso más cerca en el proceso de innovación gracias a su acercamiento constante a la tecnología y el reconocimiento de su alcance como mediación del aprendizaje. Pero esto solo es posible en cuanto confluyan elementos como gestión curricular, planeación institucional y capacitación docente para que realmente exista un vestigio de innovación educativa en la modalidad virtual,