LA MEDIACIÓN COMO ESTRATEGIA DE RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS EN EL ÁMBITO ESCOLAR

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La mediación en la escuela tiene que ir acompañada de un clima escolar donde los conflictos sean abordados como oportunidades para mejorar y se entiendan como procesos naturales.

«El proceso de la Mediación Escolar se caracteriza por ser un proceso educativo, voluntario, confidencial, colaborativo y con poder decisorio para las partes» (Munné, M. 2006).

Uno de los modelos de mediación que más se adapta al ámbito escolar, desde la perspectiva del trabajo de la Convivencia, es el transformativo. Y sigo a John Paul Lederach con las fases del proceso de mediación; son las siguientes: Premediación, entrada, cuéntame, situar el conflicto, vías de solución, acuerdo. De manera breve en que consiste cada una de ellas.

- Premediación: una reunión por separado con cada persona en conflicto, en busca de una descarga emocional previa a la mediación conjunta. Se trata de la primera toma de acuerdo y conocimiento de los mediadores-as y cada parte. Se explica el mecanismo de la mediación y se hace un relato del conflicto y sus consecuencias.

- Entrada: se realizan las presentaciones y se explican las condiciones y normas para poder realizar la mediación.

- Cuéntame: cada una de las partes en conflicto relata lo que ha sucedido.

- Situar el conflicto: se realiza el análisis del conflicto, resaltando los aspectos en común que han expuesto las partes, se pueden pedir aclaraciones.

- Buscar soluciones: se pide a las personas en conflicto, por parte de los mediadores, que realicen un torbellino de ideas sobre posibles soluciones al conflicto.

- Acuerdo: ya se llega a una solución, se analiza y se redacta un acuerdo para su firma.

La fase Premediación es muy importante, porque es donde las personas en conflicto tienen su primer acercamiento a estas actitudes de comunicación y de relación, que constituyen la base del proceso mediador y de la mediación como estrategia formativa, y de transformación de las personas.

Cada centro educativo debe elegir la forma que mejor se adapte a su situación contextual. La participación activa debe está encaminada a las acciones prácticas de los valores y las actitudes, contribuyendo al crecimiento personal de la comunidad educativa.

Recordemos que sin voluntariedad no existe proceso de mediación escolar.

Y recalco que el proceso total de la mediación es confidencial, y éste debe ser evidente y notorio para toda la comunidad escolar.

CONCLUSIÓN

Tener un equipo de mediación escolar dentro de cada institución educativa me da la pausa de soñar con tener escuelas que se preocupan por el bienestar de todo el colectivo que los conforma; directores, docentes, administrativos, padres de familia, pero sobre todo para los alumnos en la mejora de una convivencia sana.

Además, pienso que la mediación nos ayuda tanto a entendernos a nosotros mismos como a los demás, dotándonos de habilidades en la resolución de conflictos que nos ayudaran para toda la vida. Considero necesario que las normas que se faciliten para la convivencia pacífica sean establecidas desde el principio por todos los miembros de la comunidad educativa.

BIBLIOGRAFÍA

- Equipo de Convivencia del IES «Ramiro II » de La Robla (León) en el año 2003.

- Munné, M. 2006

- Lederach, J. P. El abecé de la paz y los conflictos. Educación para la paz. Madrid: Los Libros de la Catarata, 2000.