Gagne, el enfoque sistemático del aprendizaje

...

principalmente con atención y disciplina por parte de los padres y maestros.

Atención no significa convertirse en una sobra del individuo en desarrollo, sino, estar atento a su comportamiento, participar en su formación, intervenir cuando tenga conductas inapropiadas, corregir en la medida de lo necesario. Así mismo, disciplinar, no se refiere al castigo y la represión, es relativo a la repetición y retroalimentación de hábitos y valores. Cuando el individuo observa y participa de conductas repetitivas, es más fácil recordarlas y practicarlas, es esta la razón por la cual deben ser estimulados con conductas formativas enfocadas a valores.

LA ENSEÑANZA DE LOS VALORES

Tan solo en internet se pueden encontrar cerca de 265,000,000 de confidencias con el término “valores”. Aunque existen un sin número de publicaciones actuales y pasadas que aluden a la misma terminología directa o indirectamente.

“Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro. También son fuente de satisfacción y plenitud. Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro. También son fuente de satisfacción y plenitud. Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas. Son creencias fundamentales que nos ayudan a preferir, apreciar y elegir unas cosas en lugar de otras, o un comportamiento en lugar de otro. También son fuente de satisfacción y plenitud.”

En tiempos modernos suele confundirse educación con enseñanza. La educación comienza en casa, es aquí donde el individuo forma su carácter, donde se nutre de valores, esta nutrición puede ser para bien o para mal, y es altamente influenciado por las conductas de los padres y demás miembros de su familia. “Solamente mediante la repetición de actos buenos y nobles es posible lograr la adecuada formación moral que caracteriza siempre a la buena educación. Anónimo.”

Existen padres que tienen la idea de que los maestros deben educar a sus hijos, siendo que su función es enseñar las diversas disciplinas que le permitirán incorporarse a la sociedad como un individuo productivo. Si bien es cierto que las instituciones educativas enseñan con base en los valores, y cuentan con materias íntimamente relacionas con los valores, no es obligación de los académicos educar a los párvulos y mucho menos a los adolescentes, pues el sistema educativo debe reforzar los valores y no enseñarlos.

“Más que una enseñan directa y verbal de las fórmulas rígidas y fijas (haz esto, no toques aquello, saluda bien, compórtate como es debido) que, repetidas continuamente, acaban por entrar por una oreja y salir por a otra, es necesaria para una enseñanza indirecta. Trasmisible a través de la atmósfera de una familia y del ejemplo de sus miembros. Pretendemos decir con esto que es muy improbable que un niño habituado a vivir entre personas que verdaderamente se respetan y que se tratan con auténtica cortesía no aprenda a hacer otro tanto. La educación verdadera no acaba en la enseñanza de una serie de buenas maneras, sino que consiste en guiar al niño para que su crecimiento se desarrolle armoniosamente, sin muchas detenciones o dificultades; educarlo significa ayudarle a desarrollar y a usar con satisfacciones y de forma constructiva su inteligencia, su afectividad, su sentido social y sus diversas capacidades.”

Para exponer el tema de valores y la importancia de su enseñanza y práctica, es importante conocer las repercusiones en el comportamiento y el efecto que tienen en la sociedad. La práctica de los valores en el núcleo familiar, permite la consolidación de buenos hábitos.

Los valores, actitudes y conductas se encuentran estrechamente relacionados. Lo que le da al individuo la posibilidad de actuar de tal o cual modo en todo momento o circunstancia. Estos valores se traducen en pensamientos, conceptos o ideas. Pero lo que más se aprecia son las acciones de las personas. A estas acciones se les otorga un valor y es así que se determina una persona valiosa, siendo aquella que se relaciona con valores.

“En el periodo histórico en que vivimos, los padres se encuentran en una situación nada fácil…” Si hace algunos años, esta era la visión del autor, ¿cuál sería actualmente? En una sociedad donde ambos padres trabajan, con el aumento de madres solteras, la delegación de la educación por los padres a los maestros, la apertura de información y malformación de la misma en los medios (televisión, radio, internet), el uso exagerado de los medios electrónicos y la falta de valores en los mismos, donde los adolescentes actuales, veneran a actores, cantantes y blogueros, e imitan sus conductas ante los reflectores, es evidente la urgente necesidad de corregir los hábitos en cuanto a la instrucción de esta y futuras generaciones.

“El desarrollo de la iniciativa y de la autoconfianza permiten a los pequeños hacer para ellos mismos las cosas que les interesan, sin los límites de una estricta disciplina. M. Montessori.”

La disciplina debe construirse paulatinamente. Así se le permite al niño desarrollar sus valores y practicarlos constantemente sin verse presionado u obligado, sino comprometido consigo mismo y con la sociedad, en base a conductas aprendidas mediante al ejemplo.

“Hacia los dos o tres años el pequeño tiene muchas ganas de hacer cosas y, sobre todo, de divertirse, hasta el punto de que el “hacer cosas” significa divertirse con ellas. Además, el niño tiene gran necesidad de comprobar que es capaz de realizar algo determinado y se siente muy satisfecho de sí mismo cuando demuestra cierta habilidad y logra llevar a término o que ha empezado.”

Es en este periodo cuando se facilita el inculcar valores a los niños, debido a la disponibilidad que manifiestan para aprender las conductas o actividades en las que se involucran los miembros de su familia.

CONCLUSIÓN

Es ineludible la necesidad de la enseñanza y la práctica de valores en todos los ámbitos de la sociedad. Es altamente recomendado que sean practicados en el núcleo familiar, esto debido a que el individuo aprende durante sus primeros años