SECUNDARIA OBLIGATORIA, REPROBACIÓN Y REALIDAD ESCOLAR.

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Hay una marcada diferencia en la reprobación entre las materias que integran el plan de estudios, las de matemáticas y física contra las de educación física y civismo por sólo mencionar ejemplos puesto que no hay evidencia de que los contenidos escolares de tercer grado sean de más fácil aprendizaje que los de segundo, sin embargo hay una diferencia notable entre las tasas de reprobación entre estos grados, 16% para tercer grado y 27% para segundo.

Otra circunstancia que puede contribuir a la explicación consiste en las diferentes formas de asignación de calificaciones, generalmente las calificaciones se integran con varios elementos y las características mismas del contenido para efectos de evaluación y en las materias con menores índices de reprobación la situación es diferente, ya que los contenidos no tienen un carácter acumulativo para efectos de examen; esta característica puede no ser de las materias en sí, sino más bien de las pautas de los exámenes.

Una hipótesis posible es que la reprobación en cada entidad federativa se genera por las tradiciones magisteriales regionales de exigencia en la evaluación, generalmente ligadas a requerimientos de las autoridades locales (por ejemplo, no rebasar cierto límite de reprobación).

Tres elementos que combinados tienen determinación sobre la reprobación de éste nivel las características del curriculum formal, las condiciones materiales del trabajo escolar, y las tradiciones académicas del magisterio.

El currículum formal tiene tres características que contribuyen a la reprobación la primera es su extensión en relación al tiempo disponible para su trabajo; es frecuente que los programas de cada materia no se concluyan durante el año escolar. La segunda es su enciclopedismo y la tendencia a la inclusión de contenidos altamente especializados, cuando está dirigido a jóvenes que no tienen definida su especialidad; con ello se origina un bajo nivel de significación de los contenidos escolares para los estudiantes, en virtud de que corresponden a conocimientos que sólo son pertinentes en mundos especializados y que no se requieren para la vida cotidiana y la tercera, es su fragmentación, puesto que la cantidad de maestros y las horas simultáneos para la práctica docente dificulta a los alumnos la negociación para tener éxito en las evaluaciones y con ello contribuye al incremento de la reprobación.

Las condiciones del material didáctico también hace que la práctica docente disminuya la reprobación, Existen dos tradiciones académicas del magisterio de secundaria que se convierten en obstáculos para disminuir la reprobación la primera es la exigencia desmesurada de su especialidad y la segunda es la evaluación atribuida a los exámenes frecuentes.

Por todos los elementos señalados, para disminuir la reprobación sería necesario realizar varias transformaciones porque sólo así será posible avanzar hacia el cumplimiento de la aspiración de In secundaria obligatoria para todos los mexicanos.

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