Caso de Penal

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3.- Explica si existe el elemento de imputabilidad.

La imputabilidad al acusado es posible, debido a que este mismo es mayor de edad ante la ley, y tenía el libre albedrío al momento de realizar el delito. El señor Pablo pudo a ver decidido entre lo que es correcto, y en vez de eso realizo lo contrario. En igual forma se lo podría agregar, que el acusado pudo a ver evitado ese enfrentamiento, sino hubiese incitado a la víctima a la riña.

4.- Si existe alguna excluyente de incriminación.

No existe ningún excluyente de incriminación. Debido a que la justificación de legítima defensa no encuadra en este caso porque la riña es un estado antijurídico y no puede coexistir con la legítima defensa. Ya que la legitima defensa busca salvaguardar un buen jurídico tutelado de un eminente peligro. Pero en este caso no existe tal peligro y la supuesta víctima que sería el acusado no resguardando ningún bien jurídico tutelado, al contrario él está poniendo el peligro eminente al bien jurídico tutelado. Y menos hablar del Estado de necesidad, ya que no existe ningún peligro de amenaza a un bien jurídico tutelado en este caso. Al igual que no se puede acreditar el error en supuesto porque no había circunstancias que pudiesen hacer creer al acusado que se encontraba en amenaza o en representación equivocada de justificación ante la ley. Ya que las circunstancias no fueron obsoletas de realidad, por lo contrario todo apuntaba a que no existía tal error. Para concluir se puede decir que ninguna causa de justificación podría encuadrar, debido a que el acusado tanto era consciente de lo que ocasiono como al igual pudo haber previsto esa conducta o haber buscado otras soluciones para resolver esa disputa contra el señor Mario.

5.- Analiza el elemento de culpabilidad (si se actuó con dolo o culpa).

Es evidente que la culpabilidad del acusado es dolosa, ya que sabemos que por dolo se puede entender que es aquella persona que obra con toda la intencionalidad de ocasionar un resultado antijurídico. En este caso la intencionalidad del señor Pablo se ve en claro, cuando este retrocede tres pasos para sacar su arma y disparar en el lugar que había predispuesto, en las piernas de la víctima; y así se le puede agregar que el acusado a penas disparo huyo de la escena del crimen (se tenía una conciencia entro lo bueno y malo, sino el acusado no hubiese huido de la escena). Porque otra cosa seria que el arma se hubiese disparado por accidente a causa del forcejeó de la contienda, ahí si existiría el delito culposo. Pero en este caso ni el arma se disparó por accidente, y menos fue por falta de cuidado del acusado. A todo esto se podría presumir que el delito doloso fue preparado debido a que ninguna persona que no tenga intenciones de dañar a otro actuaria de esa forma, es decir, nadie sin estas intenciones, provocaría a riña y tendría un arma de fuego a su conveniencia. Seria mucha coincidencia que el acusado haya llevado por casualidad un arma de fuego, y mucha más que hubiese causado el pleito sin intención de lastimar a la víctima. Pero es claro que lo anterior es un supuesto de la intencionalidad del acusado. Con fundamento en el artículo 14 del Código penal del Estado libre y soberano de Quintana Roo, obra dolosamente aquel que conociendo las circunstancias objetivas del hecho típico, quiere o acepta el resultado prohibido por la Ley. Como se mencionó con anterioridad, al acusado era consciente del delito que cometió, ya que este mismo huyo de la escena porque sabía que si se quedaba seria detenido por las autoridades correspondientes.

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División de Ciencias Sociales y Económico Administrativas.

Departamento de Ciencias Jurídicas.

Materia: Teoría del delito

Docente: Kinuyo Esparza Yamamoto

Alumna: Sofia Barrientos Ávila

Chetumal, Quintana Roo a 10 de mayo del 2016.