FALSAS MEMORIAS Caso Mc Martin

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Caso Paul Ingram

Otro de los casos más resonantes fue el de Paul Ingram (1988), rico estadounidense, cristiano, fundamentalista, y ayudante del sheriff de la localidad de Olympia, cerca de Washington. Sus hijas Ericka y Julie, de 22 y 18 años, respectivamente, fueron a un retiro espiritual en 1988. Allí, Karla Franko se ocupó de informar a las jóvenes sobre los abusos sexuales. Al regresar a casa, Ericka le dijo a su madre que había sufrido abusos sexuales por parte de su padre, durante años, sin que ella se enterase. Paul Ingram fue denunciado por sus hijas. Al principio, Ingram consideraba absurdas las acusaciones. Pero posteriormente empezó a pensar que quizás el no recordaba nada y sus hijas decían la verdad ya que se trataba de una fuente cercana que no tiene la intención de engañar.

Nos encontramos aquí ante una doble false memoria, por un lado la de la hija Ericka y por otro lado la del propio Paul Ingram.

La hija tras recibir toda esa información por parte de Karla Franko creo un suceso que nunca había tenido lugar. Ingram por otro lado tras cinco meses de incesantes interrogatorios, presión psicológica y sugestiones por parte de policías y psicólogos acabó confesando un delio que nunca tuvo lugar. A Paul Ingram le dijeron que estaba incluido en la categoría 22 del “síndrome de la falsa memoria” en la que los agresores sexuales a menudo borran de su cerebro todo vestigio de sus fechorías. Pero que si confesaba podría reconstruir los hechos y aportar paz a su atribulada cabeza y a la vida de su familia.

Paul Ingram confesó haber violado a sus hijas repetidas veces, en base a memorias falsas creadas durante el interrogatorio por la presión sufrida y las repetidas preguntas sugestivas que se le realizaron. Se le presento una prueba incriminante, el testimonio de su hija, y se le introdujo información falso sobre el suceso a través del interrogatorio lo que le indujo a aceptar la culpa por un delito que no cometió e incluso a desarrollar recuerdos para respaldar sus sentimientos de culpa. Creo que se podría haber evitado esta situación si se hubiese llevado a cabo un interrogatorio basándose en el principio de inocencia. Se tenía que haber cuidado más la forma lingüística de las preguntas y la modalidad de aparición de la información. Se tenía que haber evitado las preguntas expectativas, implicativas y consecutivas ya que implican un cierto nivel de sugestión.

Caso Nadean Cool

Nadean Cool, una ayudante de enfermera del estado de Wisconsin, Estados Unidos, acudió a un psiquiatra para enfrentarse a una situación emocional complicada. En 1986, tras recibir varias sesiones de terapia psiquiátrica donde la especialista utilizó la hipnosis y otras técnicas sugestivas, Nadean terminó convencida de que había mantenido reprimidos los recuerdos de haber sido parte de un culto satánico, de haber sido violada frecuentemente, de haber tenido relaciones sexuales con animales, así como de haber sido forzada a presenciar el asesinato de su amigo de ocho años de edad. De acuerdo con sus primeras impresiones y argumentos sobre tales recuerdos, ella creía que los había mantenido reprimidos a lo largo de su vida y que en realidad la terapia le había ayudado a redescubrirlos.

Este es otro caso de falsa memoria, donde la hipnosis crea una pseudomemoria. Nadean aceptó la información sugerida como verdadera. Fue víctima de la influencia del esquema guiado de la terapeuta. Gracias al contraste de información conseguida de personas muy cercanas a la vida de la enfermera, se pudo probar que todo era falso y producto de la implantación de falsas memorias a través de las distintas técnicas sugestivas.

Para evitar esta falsa memoria, la terapeuta no tenía que haber insistido en Nadean para que recordase, tenía que haber evitado la presión en su terapia.

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