PLANEACION Y PROGRAMACION EDUCATIVA
Enviado por Jerry • 30 de Octubre de 2018 • 8.316 Palabras (34 Páginas) • 348 Visitas
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Cuando el/la formador/a se enfrenta a la tarea de programar una acción docente de su especialidad, es imprescindible que se cuestione una serie de preguntas; tales como:
• ¿Qué considero imprescindible que aprendan mis alumnos/as? • ¿Qué les interesa o puede interesar a mis alumnos/as? • ¿De qué forma quiero que lo aprendan? • ¿Qué tiempo y materiales necesito para llevar a cabo mi programa? • ¿De qué forma evaluaré los resultados?, etc.
La necesidad de programar está ampliamente justificada porque:
• Evitará pérdidas de tiempo. • Sistematizará y ordenará el proceso de enseñanza-aprendizaje. • Permitirá adaptar la acción formativa a las características culturales y ambientales del contexto.
La programación ha de contar con la suficiente flexibilidad y apertura para dejar posibilidades a la creatividad y a la revisión y reforma de sus elementos.
Utilidad de la programación didáctica
La programación didáctica es una herramienta útil para el/la formador/a, ya que le sirve para:
Planificar el proceso de enseñanza-aprendizaje que se desarrolla en el aula, para evitar actuaciones improvisadas y poco coherentes. - Proporcionar elementos para el análisis, la revisión y evaluación del proceso de enseñanza- aprendizaje. - Promover la reflexión sobre la propia práctica docente. - Facilitar la progresiva implicación de los/as alumnos/as en su propio proceso de aprendizaje. La programación didáctica, siempre a disposición del alumnado, favorece la implicación de estos/as en el proceso educacional, ya que les permite saber de antemano qué van a aprender, cómo van a trabajar y de qué manera van a ser evaluados. - Atender a la diversidad de intereses, motivaciones y características del alumnado.
Razones que justifican el proceso de programación docente
Programar las acciones formativas es necesario, ya que:
• La acción docente tiene la suficiente importancia como para no dejarla al azar. • Delimita los objetivos que pretendemos alcanzar. • Contempla todos los aspectos formativos, tanto los referidos a conocimientos, como • Habilidades y actitudes. • Ofrece datos concretos de la acción docente que se va a desarrollar. • Posibilita la adaptación a las necesidades e intereses personales del alumnado. • Permite el aprovechamiento de las actividades y recursos disponibles. • Posibilita la distribución de las actividades formativas en un tiempo dado evitando el riesgo del desarrollo de programas incompletos que nunca llegan a su fin. • Proporciona al alumnado información suficiente para conocer el proceso en el que se han comprometido o van a comprometerse.
El considerar todas estas razones como lo suficientemente importantes para realizar una programación, no garantiza necesariamente el éxito de la acción formativa. Este éxito viene dado por las respuestas que se sepan dar a las necesidades, intereses y expectativas del alumnado y a los requerimientos de la ocupación para la cual se están formando.
ELEMENTOS DEL PROGRAMA DE FORMACIÓN
Una vez que tenemos identificado al grupo de aprendizaje (grupo-clase) y hemos realizado el análisis del puesto de trabajo, el siguiente paso es diseñar el programa de formación propiamente dicho; para lo cual, pasaremos a describir e identificar los elementos que lo componen. Como hemos comentado anteriormente, el programa de formación abarca todos aquellos objetivos, contenidos y actividades que se pretenden alcanzar y llevar a cabo con la impartición de un módulo formativo yo curso.
Los Objetivos
En términos generales, los objetivos didácticos son enunciados que describen el tipo de conducta que el alumnado será capaz de llevar a cabo al final de un período de formación.
Los objetivos representan las metas que queremos alcanzar y, a su vez, nos darán criterios para la selección y secuenciación de los contenidos de formación, recursos y materiales formativos, metodología y para la evaluación del aprendizaje.
Clasificación de los objetivos
Los objetivos didácticos se clasifican:
a) Según el grado de especificidad:
• Objetivos generales: se formulan de forma amplia y hacen referencia a las metas finales que queremos conseguir con una determinada acción formativa.
Ejemplo: Enseñar los conocimientos, habilidades y actitudes que debe poseer ella formadora ocupacional.
• Objetivos específicos: son una concreción de los objetivos generales y se formulan dejando claros los logros parciales que tenemos que ir alcanzando para llegar finalmente al objetivo general. se centra en resultados concretos a corto plazo de, por ejemplo, módulos, sesiones o unidades de la acción formativa.
• Objetivos operativos: son una concreción más de los objetivos generales (y por tanto de los específicos también) y se formulan en forma de conducta observable y medible.
Ejemplo: diseñar y elaborar una transparencia para utilizar con el retroproyector.
b) Según el nivel en que se expresa la conducta:
• Cognoscitivos: hacen referencia a aprendizajes de tipo intelectual; es decir, conceptos, datos, hechos específicos, normas, clasificaciones, teorías, etc...
Ejemplo: distinguir las distintas fases del proceso de formación de los grupos.
• Psicomotores: hacen referencia a aprendizajes relacionados con habilidades y/o destrezas. el desempeño requiere la utilización adecuada de objetos, herramientas, ayudas, maquinaria o equipamiento.
Ejemplo: elaborar la programación de una sesión formativa.
• Afectivos: requieren la manifestación de actitudes, sentimientos y emociones. Permiten que los/as formadores/as identifiquen aspectos de la formación que pueden ayudar a los/as alumnos/as en el ámbito personal o social.
Ejemplo: respetar las opiniones de losas alumno/as.
Los objetivos deben ser formulados de manera clara y concisa, no olvidando que dicha formulación debe responder a criterios de:
• Ordenación lógica; según los aprendizajes a alcanzar,
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