ETICA Y ESTRATEGIAS GERENCIALES.

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1.1. Valores como herramientas gerenciales

La ética no puede prescindir de la noción de valor, porque las normas que conforman el mundo moral implican valoraciones o apreciaciones que permiten formular el concepto de lo que es bueno o malo; por lo tanto, es una disciplina axiológica. (Garza y Patiño, 2000)

Es así como el enfoque en el que los valores, como herramienta gerencial, adquiere más relevancia es en la Dirección por Valores, formulada inicialmente por Dolan (canadiense) y García (español) que la definen como “una nueva herramienta de liderazgo estratégico que se basa en valores y pretende introducir la dimensión de la persona dentro del pensamiento directivo en la práctica diaria, que constituye una importantísima fuente de ventaja competitiva”.

Para estos autores, los valores son los principales impulsores o motivadores, mientras que la utilidad es la recompensa. En las empresas lucrativas, dan sentido de pertenencia, posibilitan la integración y cohesión de sus miembros, además de proyectar una imagen y crear un ambiente humano y de compromiso en las organizaciones.

Blanchard, K; O’Connor 1997, menciona que en el campo organizacional los valores definen el carácter fundamental de cada organización, crean una identidad y le dan sentido de identidad a sus miembros, fijan los lineamientos para implementar las prácticas, las políticas y los procedimientos en la actuación cotidiana, establecen un marco para evaluar la efectividad de su implementación, de determinar la forma en que los recursos se asignaron, de brindar tanto dirección como motivación y de reducir la confusión y las conjeturas de todo el sistema. Es evidente entonces que en una organización los valores son tanto criterios para la toma de decisiones como promotores de comportamientos, puestos que son “una predisposición para actuar en un determinado sentido, dan sentido a los objetivos y a las instrucciones, ordenan el caos y la incertidumbre.

- Ética y toma de decisiones

Para obtener una decisión estratégica es importante evaluar formalmente las fortalezas y debilidades de la organización según el área donde vaya ser aplicar la decisión, es importante destacar en este punto lo crucial de la información, esta de debe ser confiable, verídica y sin vicios ya que basados en dicha información y con la ética profesional del gerente la empresa podría desatar un cambio en beneficio o en contra de la misma.

Seria genial poder tomar todas las decisiones bajo el modelo de Porter pero no siempre contamos con el tiempo suficiente, muchas veces en medio de la incertidumbre debemos improvisar con poca información una decisión, por eso es importante trabajar en nosotros como profesionales buscar siempre información actualizada y de calidad esto nos ayudara a tener mas conocimiento el cual nos servirá cuando estemos en apuro, cultivar nuestra ética pensando siempre que será nuestro currículum de por vida, sabiendo que si dañamos a alguien con nuestras decisiones eso será un menos en nuestra hoja curricular o en nuestras referencias personales.

(Antonio De Sousa CI: 18.933.664) refiere Para tomar decisiones en una empresa, es primordial, contar con valores, principios y conocimientos, y saber ponerlos en práctica, además de esto, los empleados de cualquier organización deben conocer con exactitud, su misión y visión como empresa, para así poder tomar decisiones de manera positiva, cada empleado debe saber hacia dónde estamos encaminados que objetivos buscamos, que objetivos nos proponemos alcanzar, con una buena toma de decisiones, que beneficios podemos alcanzar, deben tener bien claro, las cosas como deben hacerse, teniendo en cuenta nuestro sentido ético, para poder alcanzar con éxito los objetivos propuestos.

Según (Fabiola Heras C.I. 11.451.463), toda empresa busca que La toma de decisiones siempre tiene que estar proyectada, en busca de conseguir los resultados de una manera positiva, bien establecida, para así, poder tener los logros y éxito programados. A su vez las empresas juegan un papel social importante lo que supone la necesidad de integrar la responsabilidad social, y por lo tanto la ética, la mayoría de las empresas formulan sus metas, estrategias, políticas, procedimientos y normas que orienten la toma de decisiones y le dan forma a su plan de acción proporcionando una dirección empresarial.

(Jatziyanis Flores CI 16.116.134), manifiesta que La toma de decisiones debe considerarse también como algo habitual, pues diariamente y en todos los aspectos de nuestras vidas lo estamos haciendo, pero lo importante es apegarse al sentido ético, revisar todas las alternativas y evaluar bien los beneficios que aporta la elección tomada o el impacto que puede generar, de manera que siempre se solucionen los problemas de manera justa, evitando pérdidas de tiempo y aprovechando muy bien los recursos, logrando así obtener el mejor resultado posible.

Es por esto que (Rossibel Chacon, C.I 12.113.425), puntualiza diciendo que Un líder para tratar de tomar la mejor decisión, aparte de tener muy claros sus valores, conocer cuál es la misión y visión de la empresa, también debe apegarse al código de ética de esa organización ya que su principal objetivo es mantener un comportamiento integral dentro de la empresa

1.3 la ética empresarial y su relación con los valores y principios

En este ámbito, la mayoría de las personas inmersas en una cultura determinada y en una época especifica, comparten valores; es decir, comparten un conjunto de normas fundamentales establecidas culturalmente para guiar las relaciones entre los individuos de la sociedad en la cual conviven, por lo que estarán de acuerdo en lo que ha sido establecido como “bueno” y como lo “malo”.

De la misma forma, determinar que el comportamiento de un integrante de una organización es ético o no, depende en gran medida del sistema de valores de dicho individuo, ya que “son los criterios que guían la forma de actuación de las personas en forma individual o como integrantes de grupos, organizacionales y comunidades mayores” como lo expresa Etkin (1993:36).

En algunos casos, los valores son entendidos y usados como sinónimos de creencias y algunas veces visto como actitudes, por lo tanto es conveniente hacer un contraste entre estos términos. Según García y Dolan (1997) las creencias son consideradas como estructuras de pensamiento elaboradas y arraigadas a lo largo de la experiencia que sirven para explicar cómo es la realidad de los individuos y que se presentan antes de la configuración de los valores.

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