INFORME DE LA PRACTICA DOCENTE.

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Yo intervine de tal manera que las aportaciones de los chavos tuvieran lógica y se dieran cuenta de que es lo que estaban haciendo; muchas veces hacían bien los ejercicios pero a la hora de hacer alguna suma o resta se equivocaban, tal vez por falta de concentración o algún otro factor que tendrían que corregir porque esos errores tan simples echan a perder todo un procedimiento.

Las repercusiones que tuvieron estas aportaciones o llamadas de atención fueron buenas ya que se ponían a practicar y mejoraban un poco más esas cosas simples que ya les habían enseñado pero por una razón u otra se les había olvidado.

Entonces ya cuando el alumno tenía sus ejercicios o problemas iba paso a paso y cuidadosamente hacia sus operaciones que es en lo que fallaban un poco más.

Surgieron algunas dudas o dificultades por parte de algunos jóvenes cuando cambiaba de ejercicios simples a un poco más complejos y mediante la explicación detenida y a detalle y mediante algunos ejemplos y pasándolos al pizarrón a resolver ejercicios las dudas iban desapareciendo.

También surgió la duda cuando algunos chavos conocían otro método de cómo resolver los trabajos y como yo no tenía el conocimiento suficiente sobre sus métodos les sugerí que lo hicieran de la forma que a ellos más se les facilitaba y por mi parte me puse a investigar un poco más y reforcé esas maneras de solucionarlos que ellos tenían.

Puedo afirmar que los momentos de mayor interés para los alumnos fueron aquellos en los que desconocían el tema o alguna parte del tema, la forma en la que tome en cuenta las participaciones también les llamo mucho la atención y los de menos interés fueron aquellos en los que necesitaban utilizar más su razonamiento abstracto, es decir en una ocasión les puse un ejercicio complejo de tal manera que solo necesitaban usar su lógica para darse cuenta de que lo único que iban a hacer era sumar y restar fracciones que era lo que veníamos haciendo de hace días, sin embargo no les llama la atención esforzarse un poco más de lo necesario.

Los estudiantes aprendieron las operaciones básicas con fracciones, además reforzaron su capacidad para realizar las operaciones básicas con decimales; aprendieron como sacar el mínimo común múltiplo y conceptos básicos de lo que es una fracción, las partes de la fracción y como representarla.

Hubo gran avance solo en una parte del grupo ya que los demás necesitaban de más atención, ayuda de sus padres o en ciertos casos no había modo de hacerlos interesarse por la clase, las dificultades que se presentaron se solventaron en las clases explicando detenidamente en conjunto con los alumnos y atendiendo algunas dudas personalmente, sin embargo no es suficiente, lo correcto es practicar día con día para mejorar. Me daba cuenta del avance y de los saberes que tenían los jóvenes cuando no comprendían muchas cosas, se notaba cierto rezago en temas o cosas que ya debían saber, esto provocó que me retrasara en dos o tres clases y los alumnos que tenían más capacidad para comprender, sentían que ya dominaban el tema pensando que no había ejercicios más complejos.

En la evaluación tomé en cuenta varios aspectos y no solo uno, es decir tome en cuenta todo el trabajo y los procesos realizados de los alumnos desde la asistencia, tareas, participaciones y la evaluación que prácticamente eran ejercicios que habíamos visto en clase, dependiendo lo que vimos la clase pasada, me permitía avanzar la siguiente clase, si se quedaba algún trabajo pendiente o algunas dudas las resolvíamos, si se quedaba tarea la revisaba y después la resolvíamos en conjunto y conforme veía avance en los chavos seguía con el tema.

Para desarrollar mis clases utilice cartulinas, el pizarrón, para las participaciones utilice unos papelitos simbólicos los cuales significaban una participación cada que alguien complementaba algo, en una actividad utilice fichas de trabajo y otros como marcadores y colores. El cuaderno es otro recurso importante en el cual los jóvenes llevaban sus anotaciones y ejercicios, aunque en realidad algunos no lo utilizaban y dejaban todo a la desidia reflejándolo al momento del examen sin saber que hacer; al momento de revisar la tarea le daba algunas ojeadas al cuaderno y me daba cuenta de quienes trabajaban y quienes no; debido a que no tenían libro de texto, todas las actividades iban dentro del cuaderno.

Mediante una actitud de autoridad e imponencia, así como una buena comunicación con los alumnos logré mantener el orden en clase y seriedad durante las actividades; en algunos momentos llamaba la atención alzando la voz cosa que desconcertaba a algunos chavos pues no estaban acostumbrados a ese tipo de regaños.

Cierta parte del grupo mostraba mucho interés en la asignatura inclusive algunos comentaban que se había convertido en su materia favorita pues les gustaba la manera en la que llevaba a cabo la clase.