ESCUELA TRADICIONAL VS ESCUELA NUEVA, Y MI PRÁCTICA DOCENTE

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Otro aspecto importante a tomar en cuenta es el social, y es que en algunos casos las actividades sociales realizadas por las comunidades en donde se inserta nuestra labor cobran mayor importancia que las desempeñadas por la escolares, también acá podemos mencionar que alumnos que tienen una lengua materna distinta al español tienen procesos de aprendizaje distintos a los que nosotros esperamos, siendo este otro atenuante a tomar en cuenta.

Desde mi perspectiva la educación no es un todo acabado y los dos tipos de escuela pueden mejorar nuestra práctica docente, teniendo una variedad de estrategias que podemos desarrollar. Es cierto que bajo los argumentos de la escuela nueva, el aprendizaje de los alumnos es espontaneo y libre, sin embargo el caer en un exceso de ello podemos ver que el propósito de lo que estamos estudiando se pierda, así que podemos ejercer cierto tipo de orden para guiar hacia la meta establecida todos las ideas y conocimientos que nuestros alumnos manifiesten. Además podemos mencionar que como docentes de educación publica debemos alcanzar los propósitos descritos en los planes y programas de estudios.

Y hablando en alcanzar los propósitos de los planes y programas de estudios otro aspecto que como docentes debemos cuidar es el tiempo que se dedica al estudio de ciertos temas, esto apremia para que nuestra labor docente recaiga en prácticas de la escuela tradicional para alcanzar el mayor porcentaje de los propósitos en los tiempos designados.

En función de mi práctica docente considero que es importante tomar en cuenta las características individuales de cada uno de nuestros alumnos para establecer estrategias que le ayuden a acercarle el conocimiento y estas pueden ser del tipo tradicional o progresista, pero cada docente con su práctica docente construye su tipo de escuela.