Caso - Mango.

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La cultura organizativa como recurso intangible, se potencia a través del diálogo permanente pretendiendo tener un equipo dinámico, joven, motivado y con buen clima. Se prima la promoción interna, el desarrollo profesional y la conciliación. Todo ello enfocado a la experiencia del cliente, la compra y a una imagen de marca responsable, sustentada en las acciones enmarcadas en su responsabilidad social corporativa.

Por último, los canales de comunicación proporcionan al cliente un experiencia adicional diversificando los puntos de venta y formando parte de la estrategia de marketing para reforzar la imagen de marca.

- ¿Dónde residen sus ventajas competitivas?

De los recursos y capacidades anteriormente señalados, indicaremos las ventajas competitivas que dispone Mango. En primer lugar, el sistema logístico Mango que es clave para la reducción del tiempo y costes. Este modelo les permite integrar en su cadena de valor a proveedores (contrato de exclusividad y controles) y puntos de ventas (propios y franquicias) por medio de su logística. Lo que les permite la satisfacción de stock de una manera rápida y eficiente. Mango fundamenta este sistema bajo tres pilares, velocidad de distribución del género, información que fluye entre centros y tecnología (software propietario). El objetivo es poder controlar todas las fases del proceso: diseño, fabricación y distribución para mejorar la productividad y mantener una eficiente estructura de costes.

Dada su perdurabilidad y difícil apropiabilidad, se identifica como la más notoria.

Para ello, Mango, utiliza el sistema de petición bajo demanda, just in time, que le permite abastecer cualquier punto de venta con el mínimo stock. Aplicando este sistema a la integración vertical con sus franquicias, se abastece con un depósito inicial a la franquicias que Mango repone en función de las ventas y del que el franquiciado no responde. Esto supone reducir costes y tiempos de entrega, y se coordina a través del software propietario que permite conectar y coordinar a todas las partes actoras de la logística.

Dentro del proceso productivo, identificamos también el diseño como canalizador de la diferenciación y el posicionamiento, ligados indisolublemente a la imagen de marca. Y la cultura organizativa, que se basa en incentivos, promociones internas y van siempre dirigidos al buen clima, el diálogo y la motivación del personal.