La mujer en las relaciones laborales

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Por ello se considera que actualmente existen medidas de acción con el fin potenciar la participación de las mujeres en igualdad ante el mundo laboral, es uno de los planes elaborados y aceptados más válidos para que la igualdad entre hombres y mujeres se haga real, que junto a ello, la competitividad de las empresas depende, el servicio, la calidad y una serie de factores que en última instancia al único recurso con que se cuenta es el humano y la mitad de ese valioso recurso es, precisamente, femenino.

La plena potenciación de todos los hombres y mujeres, sin discriminaciones ni diferencias que no provengan de la capacitación y el esfuerzo de cada cual, se

convierte en el principal activo de las empresas; ese sentido la igualdad seria el requisito de la competitividad, esto beneficiaria en lo laboral a cualquier organización.

Por otra parte en lo político a nivel local, es innegable el gran avance que se ha tenido en cuanto a temas de equidad de género en general, sin embargo en la actualidad, los políticos varones tienen el 61,8% de presencia en la Asamblea Nacional, denotando esto, la necesidad de generar conciencia dentro de las organizaciones políticas para que más espacios principales sean confiados a las mujeres, ya que a pesar de existir la obligatoriedad en el cumplimiento de los principios de alternabilidad, paridad y secuencialidad en la mayoría de los casos las listas no las encabezan las mujeres.

Las elecciones seccionales mostraron la clara intención de aplicar en su integridad el código de la democracia, ante tal exigencia los partidos políticos asignaron espacios principales de participación y de representación a más mujeres, quienes además de ser mujeres son jóvenes en su mayoría, lo cual implica también un relevo generacional tan necesario, el panorama es esperanzador para quienes sabemos la importancia que tienen y por ello nos interesamos en temas de género.

Es necesario destacar que, nuestra constitución proporciona las condiciones para que la mujer desarrolle libremente sus procesos políticos; el reto está en el cambio cultural, en compartir e impulsar aspectos y prácticas que incorporen la participación equitativa de las mujeres, siendo estos temas de interés y trabajo de políticas públicas integradoras, donde se promuevan las prácticas cotidianas de respeto e inclusión por parte de todos los sectores e instituciones que integran la sociedad.

Se debe tener en cuenta que aún falta trabajar, debemos tener una amplia formación académica, una actitud propositiva basada en el conocimiento empírico de las problemáticas y de los contextos, continuando el trabajo de ampliar y desarrollar prácticas de la división sexual del trabajo, donde mujeres y hombres se encuentren en igualdad de condiciones.

En cuanto a estos dos aspectos (Lo político y lo laboral) podemos notar que si se ha logrado un avance, que la lucha que traen las mujeres desde tiempo atrás ha venido a relucir en estos tiempos otorgándoles mayores beneficios, mayores oportunidades en cualquier área en la que piden una oportunidad.

Un ejemplo muy claro está en la actualidad donde para las elecciones del 2018 ya se postuló una candidata nuevamente para la presidencia de la república Mexicana, la cual está teniendo gran impulso; pero a su vez se está abusando de esta revolución de la equidad de género ya que trata persuadir a la gente, cayendo en el error de tener que sentirse superior a un hombre, hablando de que ella si va a poder hacer lo que los otros presidentes (hombres) no han podido hacer bien.

Conclusión.

Las mujeres han tenido distintas participaciones dentro de la historia hasta llegar a este momento en el que se exige un trato igualitario entre hombres y mujeres, así como ser defendidas, respetadas y para esto en los procesos de selección de personal, cuando una mujer valla y solicite un empleo no se deben utilizar criterios subjetivos, sino solamente las cualidades profesionales y la idoneidad de las personas y, en consecuencia, las convocatorias para cubrir puestos de trabajo se deben hacer atendiendo a estos únicos criterios de capacitación profesional sin distinción alguna por razón de sexo.

Considero que la finalidad de las empresas esta con la sociedad en la manera en que ofrece sus bienes y servicios, de tal manera que detrás existe un equipo conformado por distintos trabajadores y trabajadoras que en conjunto con una buena relación laboral, se puedan lograr los objetivos de la empresa y para esto el encargado debe supervisar que haya el trato y sueldo igualitario así como premiar los esfuerzos etc.

Modificando la cultura los aspectos y prácticas que socaban la autoestima de las mujeres que no sólo es violentada por los hombres sino por múltiples instituciones sociales es posible, hay que trabajar en el fortalecimiento de la participación pública de las mujeres, para que estas no sean estereotipadas ni limitadas socialmente por su género.

“De la igualdad de habilidades surge la igualdad de esperanzas en el logro de nuestros fines”

Thomas